En el mundo posterior al 11 de septiembre de 2001, la religión ha salido de lo privado para estar presente en el espacio público más que nunca.
El retorno de lo religioso exige construir un arteísmo sólido, fundamentado, y rescatar a la “ateología” (neologismo propuesto por Georges Bataille), del silencio sistemático en que la ha sumido la historiografía oficial de las ideas.
El libro consta de cuatro partes: “Ateología“, “Monoteísmos“, “Cristianismo” y “Teocracia“.